Ha trascendido que la empresa COME rechaza la contratación del personal femenino para el trabajo directo en el transporte. No es la única empresa de transporte que sigue manteniendo como coto masculino, conducir y cobrar boletos.
Esta situación es una violación flagrante de las leyes nacionales y acuerdos internacionales con relación a la igualdad de género en el mundo laboral.