Día: 30 de junio de 2007

El desafío de transformar el mundo mientras nos transformamos . Guacira César

Guacira César de Oliveira

Para hacer un debate político sobre la democracia, tenemos que partir de realidades concretas y no de puras abstracciones. La realidad concreta de donde parto es la de América Latina y, más específicamente, la de mi país, Brasil. Estamos, por lo tanto, hablando de la región que sufre los más altos índices de desigualdad del planeta. La concentración de la renta y del poder en nuestro país es enorme.

Visiones feministas

Los Terceros Diálogos Feministas (DF) se realizaron del 17 al 19 de enero de 2007 en Nairobi, Kenya, antes del VII Foro Social Mundial (FSM). Con el título “Transformando la Democracia: Visiones y Estrategias Feministas”, más de 200 mujeres de todo el mundo se reunieron durante dos días y medio a debatir cómo combatir los fundamentalismos, el militarismo y la globalización neoliberal. Los DF fueron concebidos como espacios de diálogo y articulación para incidir y posicionar las preocupaciones del movimiento feminista internacional en la agenda del FSM. Los primeros DF se celebraron en Mumbai, India (2004), como continuación de la reunión estratégica de mujeres espontáneamente realizada a la sombra de un árbol en Porto Alegre en 2002. Los segundos DF se organizaron en Porto Alegre, Brasil (2005). Con la tercera edición de los Diálogos se consolida un espacio vital para repensar y avanzar en la construcción de los proyectos políticos del movimiento feminista y las nuevas formas de los procesos democráticos.

Lilián Celiberti y Guacira César de Oliveira profundizan en la elaboración política que se dio en estos Terceros Diálogos Feministas.

Sí en mi nombre

Soy una “abajo firmante”. Mi nombre está junto al de tantas otras cientos y cientos – miles ya – de personas que firman para solidarizarse con la mujer que fuera procesada por el “delito de aborto”. Una muchacha de 20 años que debió interrumpir su embarazo (por las múltiples razones que se pueden invocar y todos conocemos) y que fue denunciada por un médico que debería ser denunciado, a su vez, por haber faltado al secreto profesional. Hombres y mujeres que decimos “Yo firmo” porque estamos indignados. ¿Cuál es la “dosis suficiente” de hipocresía que los y las uruguayos estamos dispuestos a soportar?

Firmas contra la hipocresía

El 16 de mayo pasado una mujer uruguaya fue procesada por el “delito de aborto” luego de consultar en el Hospital Pereira Rossell (HPR), del Ministerio de Salud Pública (MSP). La joven de 20 años había asistido a una clínica clandestina y fue derivada a dicho hospital por un médico particular que constató complicaciones post aborto, no sin antes denunciarla ante la justicia.