Anguissola, Sofonisba, pintora, (Italia, 1532 – 1625). Se especializó en autorretratos de los que sólo se conservan 13, en los que aparecía a veces con un libro entre las manos, otras tocando el clavicordio. Hizo asimismo muchos retratos en la Corte española, aunque nunca firmó ni cobró por sus obras.
Caccini, Francesca, compositora, (Italia, ? - 1581).
Considerada la iniciadora de la canción barroca, su ópera la "La Liberazione di Ruggiero", fue la primera compuesta por una mujer.
Colonna, Vittoria, poeta (Italia, 1490 – 1547).
Al morir su marido se dedicó por entero a la poesía. Fue llamada "La Divina", tanto por su personalidad y su belleza, como por su obra. Miguel Ángel se enamoró apasionadamente de ella y la acompañó en su muerte a los 57 años.
Diana de Poitiers, (Francia, 1499 – 1566). Famosa por su inteligencia, belleza y ambición fue, durante 28 años la amante de Enrique II de Francia, 20 años menor que ella. Tuvo un rol político importante y era consultada por los embajadores extranjeros. Como católica, intervino en las luchas contra los protestantes. A la muerte del Rey, odiada por la reina Catalina de Médicis a quien había opacado políticamente, se retiró a unos de los castillos que Enrique le había regalado donde murió a los 60 años al caer de un caballo. 
Isabel I, Tudor, reina, (Inglaterra, 1533 – 1603).
Hija de Ana Bolena (quien a pocos meses de su nacimiento fue ejecutada por orden de Enrique VIII), tuvo una infancia triste. Asumió el trono a los 25 años y gobernó con sabiduría política y moderación en las aguas turbulentas de las guerras de religión. Los 45 años de la era isabelina son sinónimo de éxito en todos los niveles, económico, militar, cultural, social. Poseía una enorme cultura y un carácter fuerte. Nunca se casó, aunque manejó esa posibilidad con diplomacia, prometiendo bodas que jamás concretaba. Son conocidos en cambio sus múltiples amantes, aunque quiso por epitafio: "Aquí yace Elizabeth, que murió reina y virgen". Dejó de heredero del reino de Inglaterra al hijo de María Estuardo a quien había mandado ejecutar por supuestas intrigas religiosas. 
Gournay, Marie de, escritora, (Francia, 1566 – 1645).
Erudita en los "Ensayos" de Montaigne, se dedicó, a la muerte de éste, a estudiar su personalidad misógena. Escribió "Igualdad de los hombres y las mujeres", una crítica amarga de la condición femenina de su tiempo. "Feliz tú, lector, si no perteneces a ese sexo (el femenino) al que se niegan todos los bienes al privarle de la libertad...apartándole de los cargos, los oficios y funciones públicas...".
Juana d’Albret, reina de Navarra (Francia, 1528 – 1572).
Obligada a casarse a los 12 años con el Duque de Clèves, obtuvo la anulación del matrimonio cuatro años más tarde por la no consumación del mismo. Se casó luego libremente y dedicó su vida a sostener sus convicciones calvinistas contra las de los católicos, siendo una de las defensoras del Sitio de La Rochelle. Su correspondencia muestra un alto nivel literario y es de gran interés histórico.
Labé, Louise, poeta (Francia, 1524 – 1556).
Fue el alma mater del grupo de intelectuales más famosos de Lyon. Pero fue su obra la que la hizo célebre, sobretodo su "Debate de locura y de amor" en el que reivindica el derecho de las mujeres a igualar a los hombres "no sólo en belleza, sino en el conocimiento de las ciencias". Escribió 24 Sonetos evocando el amor físico.
María Estuardo, reina, (Escocia, 1542 – 1587).
Educada en Francia amó la poesía por sobre todas las cosas y fue reina hasta la muerte precoz del primer marido, Enrique II. Obligada a volver a Escocia al que consideraba un país bárbaro, y debiendo asumir el trono, se vio mezclada, como católica, en las intrigas de las guerras de religión, hasta abdicar. Huyó a Inglaterra pidiendo refugio a su prima protestante, Isabel I, quien la mantuvo confinada durante 20 años en diferentes castillos hasta condenarla a muerte por supuesta conspiración. La dignidad y el coraje que mostró durante su cárcel y ejecución, conmovieron hasta a sus enemigos. 
Sabuco, Olivia, médica (España, 1562 - 1588).
En su libro "Nueva Filosofía del Hombre" refuta las teorías de Aristóteles afirmando que la sangre menstrual no es impura ni venenosa como éste pretendía. Fue pionera en medicina psicosomática y supo darle importancia a la higiene. Sus colegas la persiguieron y llegaron a destruir la primera edición de la "Nueva Filosofía".
Teresa de Ávila, Santa, mística y escritora, (España, 1515 - 1582).
Se dice que llevó al plano religioso la pasión por las novelas de caballería que había devorado en su adolescencia. Reformó la Orden del Carmen, fundando varios conventos de Carmelitas Descalzas, orden más severa que las anteriores. Practicaba el ayuno y la flagelación, tuvo visiones, oyó voces, afirmó haber conocido la levitación y la transfixión: un ángel le atravesó el corazón dejándola "poseída de un gran amor por Dios". Dejó una de las obras más importantes de la mística española, escrita en estilo directo: "El Camino de la Perfección", "El Castillo interior" y su Correspondencia con más de 400 cartas.