Un 66% de las personas que viven en Uruguay entiende que las mujeres deberían ocupar más cargos políticos y casi seis de cada diez (57%) ve positivamente la aplicación de medidas afirmativas, incluso ve con mejores ojos la paridad que el mecanismo de la cuota.
Los datos surgen del estudio cuantitativo «Actitudes hacia la participación de mujeres en política y mecanismos de acción afirmativa en Uruguay», encargado por ONU Mujeres y el PNUD a la consultora Cifra. La encuesta fue presentada el martes 6 de setiembre en el Palacio Legislativo con la presencia de los líderes de partidos (todos varones) con representación parlamentaria.
Uno de los hallazgos más relevantes es que las personas con educación terciaria son las más resistentes a aceptar una mayor participación políticas de las mujeres y la aplicación de medidas que contrarresten la desigualdad en el acceso de ellas a los cargos de decisión. Sin embargo, la oposición más significativa proviene los varones con mayor formación. De acuerdo al análisis de la directora de Cifra, Mariana Pomiés, esto podría deberse a que los integrantes de este grupo son los que ocupan los principales lugares de poder y decisión, y podrían sentirse potencialmente “amenazados genuinamente” ante una mayor participación femenina.
La coordinadora residente de Naciones Unidas en Uruguay, Denise Cook, señaló que Uruguay tanto en relación a su propia historia (uno de los primeros países en legalizar el voto femenino) como en la comparación internacional el país “está mostrando un déficit democrático que poco responde a sus profundas convicciones cívicas”.
Luego de la aplicación (por única vez) de la ley de cuota de género en las elecciones de 2014 el parlamento uruguayo quedó integrado con un 20% de mujeres, por debajo del promedio mundial (22.9%) y del 30% que alcanzaron hace ya varios años países con desarrollos similares como Argentina y Costa Rica. Al 1º de junio de 2016, Uruguay se encontraba en el puesto 117 de 193 posiciones en la clasificación mundial de la Unión Interparlamentaria y ONU Mujeres con respecto al porcentaje de mujeres que integran las cámaras de representantes. Considerando el mismo indicador para América Latina, Uruguay queda en uno de los últimos lugares.
El Estado uruguayo asumió compromisos internacionales en los que la igualdad y la participación política aparecen como prioridad. Cook recordó que el comité especializado de la ONU (CEDAW) recomendó recientemente a Uruguay que adopte medidas afirmativas, diseñe un sistema de paridad y vuelque recursos de formación de liderazgos para las candidatas. “La igualdad es la meta, la paridad es el camino”, concluyó.
Ver adjunto estudio de Cifra