Difundimos el comunicado de las trabajadoras de Sindicatos y Asociaciones de Trabajadoras Domésticas del Mercosur y la Región Andina y la campaña que realizamos con la Articulación Feminista Marcosur al respecto.
Últimas en derechos, primeras en necesidad
Las Trabajadoras de Sindicatos y Asociaciones de Trabajadoras del Hogar/ Trabajadoras del Servicio Doméstico/ Trabajadoras de Casas Particulares de Mercosur y de la Región Andina, olvidadas durante años por los gobiernos, las entidades publicas y la comunidad internacional, queremos enviar un mensaje de ALERTA y AUXILIO a los gobiernos de Argentina, Brasil, Chile, Colombia, Paraguay, Perú, Uruguay, así como a los Ministerios de Trabajo, Desarrollo, Inclusión Social, de la Mujer, a la Organización Internacional del Trabajo OIT a ONUMUJERES y a la sociedad en general:
Señor presidente de Argentina Alberto Fernández
Señor presidente de Brasil Jair Bolsonaro
Señor presidente de Chile Sebastián Piñeira
Señor presidente de Colombia Iván Duque
Señor presidente de Paraguay Mario Abdo Benítez
Señor presidente de Perú Martín Vizcarra
Señor presidente de Uruguay Luis Alberto Lacalle
Durante esta crisis emergente por el COVID 19, las políticas gubernamentales de nuestros países, han demostrado importantes esfuerzos por proteger a las empresas, a algunos grupos de trabajadores formales y a algunos grupos de población que han identificado como vulnerable y posible beneficiaria de subsidios, en ese espacio nosotras las trabajadoras del hogar, nos sentimos desheredadas, por los Estados, por las familias para las que hemos trabajado y por la sociedad en general.
El reconocimiento de nuestros derechos ha llegado tardíamente en el 2013 con la entrada en vigor del Convenio 189 de la OIT, sin embargo, nuestras legislaciones apenas inician su implementación, y en esta crisis se ha manifestado como nunca antes la falta de protección de nuestros derechos, ya que la mayoría de nosotras tiene una precaria relación contractual, un alto porcentaje tenemos contratos verbales, sin prestaciones sociales, pagando nuestra seguridad social de manera independiente, o afiliadas a los programas de salud de los Estados, sin ser reconocidas como trabajadoras, otras trabajan con contratos por día o por hora, lo que minimiza la responsabilidad del empleador y nos invisibiliza frente al Estado, muchas de nosotras, somos madres cabeza de hogar, tenemos la responsabilidad de nuestras familias.
Con nuestro trabajo aportamos cada día a la economía de nuestros países, fortalecemos el tejido social a través del cuidado de las familias, para que las y los proveedores puedansalir a trabajar, sin embargo hoy, ante la crisis de la pandemia, frente a la cual nosotras también queremos contribuir, además de cuidar de nuestra salud y la de nuestras familias, enfrentamos un confinamiento en medio del temor y la zozobra, no solo por el miedo al contagio, sino por la angustia de no tener recursos para la alimentación, para realizar los pagos a la salud y pensión o del arrendamiento.
En este aislamiento enfrentamos la reacción de los Estados con medidas que desafortunadamente no nos resguardan, y de nuestros empleadores que producto del miedo han 1. Cancelado los contratos sin justa causa, enviándonos a casa sin salario, para alejarnos de sus casas por temor al contagio 2. Disminuido el tiempo de trabajo y reduciendo proporcionalmente el pago. 3. Alejándonos de nuestras familias para confinarnos con sus familias, so pena de perder el empleo, dejando desprotegidas a nuestras propias familias, y en general sin las medidas de protección sanitarias, que garanticen nuestro derecho a la vida y a la salud, en muchos casos debemos salir a trabajar en medio de la aglomeración de gente en los transportes públicos, sin posibilidad real de cumplir con el distanciamiento social.
Hacemos un llamado a ustedes, para que se respeten y garanticen nuestros derechos: como mujeres, a unavida libre de violencias; como trabajadoras nuestrosderechos laborales incluidas, las prestaciones sociales, salario digno, mínimo, vital y móvil, acceso y cobertura en salud y como ciudadanas, sujetas de derechos a la vida, a la salud, al alimento y a la familia.
Necesitamos apoyos económicos concretos, alimentos, elementos de protección y protocolos de prevención y protección para el cuidado en las familias en las que trabajamos, que los Ministerios de Trabajo, establezcan medidas de inspección y vigilancia específicas para nuestro sector, pero especialmente necesitamos de la solidaridad y el respeto de nuestros derechos parapoder cuidarnos y cuidar a otros incluidas nuestras familias.
Esperamos que este llamado de urgencia tenga eco, en nuestros Estados y la sociedad en general, adjuntamos un breve resumen de la situación por país y solicitamos a las autoridades se pongan en contacto con las lideres de nuestros Sindicatos, quienes firman esta declaración.
Sindicatos y Asociaciones de Trabajadoras del Hogar/ Trabajadoras del Servicio Doméstico/ Trabajadoras de Casas Particulares, suscribimos el presente, el 30 de marzo de 2020.
ARGENTINA
AMUMRA – ASOCIACION CIVIL DE DERECHOS HUMANOS MUJERES UNIDAS MIGRANTES Y REFUGIADAS EN ARGENTIMA
ENTRE RIOS: SECFER – Sindicato Empleadas en Casa de Familias de Entre Ríos
NEUQUEN: ANED – Asociación Neuquina de Empleadas Domesticas
TIERRA DEL FUEGO: Unión de Empleadas Domésticas Tierra del Fuego
FLORENCIO VARELA: UTCAP – Unión de Trabajadoras de Casas Particulares
BRASIL
FENATRAD- Federación Nacional de las Trabajadoras Doméstica de Brasil
CHILE
SINDUCAP – Sindicato Nacional Unitario Inter- Empresa Trabajadores y trabajadoras de Casa Particular
COLOMBIA
SINTRASEDOM – Sindicato Nacional de Trabajadoras del Servicio Doméstico
PARAGUAY
SINTRADESPY – Sindicato de trabajadoras domésticas del Paraguay
PERÚ
SINTRAHOGARP sindicato nacional de trabajadoras del hogar del Perú
AMUNETRAP Asociación de Mujeres Negras Trabajadoras del Perú
URUGUAY
SUTD-PIT-CNT SINDICATO UNICO DE TRABAJADORAS DOMÉSTICAS
Comunicado disponible para descargar en pdf aquí.
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