Mensaje del Centro de Documentación e Información Bolivia (CEDIB) a la opinión pública.
A LA OPINIÓN PÚBLICA
Estimados amigos/as de CEDIB:
Como es de conocimiento público, CEDIB – Centro de Documentación e Información Bolivia está a punto de cumplir 50 años de vida. Nació en medio de la dictadura militar. Su objetivo fue documentar y resguardar la memoria histórica reflejada en la prensa nacional, por lo cual creó un archivo único en su género.
Para nadie es desconocido que, en los últimos años, la agresiva política gubernamental en torno a la explotación de recursos naturales es cada vez más incompatible con las garantías y mecanismos previstos en el ordenamiento democrático para un entorno respetuoso de los derechos humanos en general y en particular los relacionados con el medio ambiente.
En ese marco, el trabajo de organizaciones de la sociedad civil como la nuestra, que cuestionamos el incremento de concesiones petroleras y mineras en áreas protegidas y territorios indígenas, es blanco de ataques sistemáticos: señalamientos públicos, hostigamiento tributario, económico y administrativo, así como amenazas de diversa índole.
En los últimos años, el CEDIB ha luchado por continuar con su trabajo en medio de continuas acciones para inviabilizarnuestra existencia económica y legal. Detallamos a continuación, las más importantes, no sin antes señalar que nos preocupa de sobremanera que se han tornado cada vez más agresivas.
• Hostigamiento y acoso administrativo de distintas instancias
• Descalificaciones y amenazas públicas de altas autoridades del poder ejecutivo
• Inseguridad jurídica ya que el trámite para renovar nuestra personería jurídica lleva ya tres años sin concluir.
Aclaramos a la opinión pública, que en todos los casos, pese al abusivo acoso administrativo, y al enorme esfuerzo que implicaba la revisión de documentos y archivos de hace décadas, siempre hemos sido capaces de demostrar que hemos cumplido con todas nuestras obligaciones.
Creemos que cuando esta vía les resultó infructuosa, se vieron en la necesidad de buscar nuevos frentes para atacarnos. A principios de este año el señor Juan Ríos, público aliado del gobierno, aprovechó su posición como Rector de la UMSS para ejecutar el desalojo forzoso de la sede en la que se acogía nuestro fondo documental patrimonial.
Aunque el golpe fue duro, la voluntad del equipo así como la solidaridad nacional e internacional nos permitió seguir funcionando y recuperar la normalidad en nuestras actividades. Sin embargo cerca de finalizar el año se nos informa que se ha instruido la anotación preventiva de nuestros bienes y el congelamiento de cuentas bancarias.
Estas medidas afectan principalmente los derechos laborales de los trabajadores y trabajadoras del CEDIB. La mayor parte de los fondos inmovilizados (alrededor de 83%) corresponden a salarios y beneficios sociales del equipo de trabajo, la mayor parte mujeres jefas de hogar. Esta medida es abusiva debido a que no era necesario llegar a este extremo pues el monto demandado excede el valor de los bienes inmovilizados y de hecho nos pone en situación de vulnerabilidad al convertirnos en blanco de multas si dejamos de cumplir nuestras obligaciones.
Para finalizar, estamos seguros que estos ataques se enmarcan en un contexto de creciente hostigamiento a los defensores de Derechos Humanos y de la Naturalezaen Bolivia; mismos que van desde acciones violentas en territorios indígenas hasta la división y toma de organizaciones que resisten proyectos extractivistas y la aprobación de una ley que restringe la libertad de asociación civil para aquellas organizaciones que no se alineen con las políticas gubernamentales.
A todos los amigos, amigas y defensores de derechos humanos y ambientales, les pedimos apoyo en este momento difícil. Exigimos el cese de acoso a CEDIB, se otorguen las garantías para un proceso justo que respete nuestro derecho a la defensa, así como el descongelamiento de nuestras cuentas para no afectar los derechos laborales y la subsistencia de los trabajadores y trabajadoras de CEDIB.
Sin embargo, declaramos nuestra voluntad de seguir trabajando y luchandopor nuestro derecho a existir, a investigar y debatir ya que es el mejor aporte que podemos hacer a nuestro país. No estamos dispuestos a consentir llanamente el vivir en un país donde la investigación, el pensamiento libre y la defensa de los derechos humanos sea un delito. Vamos a seguir caminado junto a aquellos que defienden su territorio y su forma de vida.
Cochabamba 8 de diciembre de 2017
TO THE ATTENTION OF ALL CONCERNED PEOPLE
Dear Friends of CEDIB:
It is public knowledge that, CEDIB – Center for Documentacion and Informacion of Bolivia is about to turn 50. Founded during the military dictatorship, its purpose was to document and preserve the historical memory as it was presented in the national press. To this end a unique periodical library was created.
In recent years, it has become clear that government policies with regard to the exploitation of natural resources have become more aggressive. This, in turn, has led to a growing incompatibility with democratically established human rights in general and with the protection of the environment in particular.
Given this situation, it is the obligation of civic organizations such as ours, along with the independent press and indigenous communities to question the increase in oil and mining concessions in protected areas and indigenous territories. But these questions have made us a target of systematic attacks such as public rebukes, tax and finance harassment and a variety of other threats.
Our organization, in particular has struggled to carry out its purpose in the face of continued actions aimed at makingour economic and legal existence unviable. We list the most significant ones below and it is increasingly worrisome that these have become more and more aggressive over time.
• Administrative harassment from different instances.
• Public discrediting and threats from highly placed authorities in the executive branch of
the government.
• Judicial insecurity given that the process to renew our legal entity has not been completed
after 3 years.
We must emphasize that, despite the harassment on the part of the administration and the enormous effort required to review 20 years of documents and files, we have always been able to demonstrate that we have fulfilled all out Tax and Labor obligations.
It appears that when these tactics failed, the authorities sought new means to attack us. In early 2017 Mr. Juan Ríos, a well known ally of the government, used his position as Chancellor of The University of San Simon to evict us in the most destructive way possible.
Athough this was a terrible blow, the will and determination of our staff, along with the national and international solidarity we were shown, made it possible for us to carry on our activities smoothly. Now at the end of 2017, we have been informed that our bank accounts have been frozen and a preventive annotation has been made on our assets.
These measures mainly affect the rights of CEDIB workers since 83% of the funds that were frozen were destined to pay salaries and the legally required social benefits of the staff, most of which are female heads of households. This measure is abusive since there was no need to go so far. The amount demanded exceeds the value of our assets and exposes CEDIB to fines if we are unable to meet our fiscal obligation to the State.
In conclusion, we are convinced that these attacks are part of a concerted effort to harass any person or institution that defends Human and Environmental Rights in Bolivia. These actions range from violence against indigenous territories, the division and takeover of indigenous organizations to the passage of a law restricting freedom of civil association for organizations that do not agree with government policies.
We ask all friends and defenders of Human and Environmental Rights for their support in this dif-ficult time. We demand an end to the harassment of the CEDIB, legal guarantees for a fair hearing that respects our right to defend ourselves and the immediate release of our funds in order to protect the rights and survival of CEDIB workers.
Most of all, we declare our determination to continue working and striving for our right to remain a center of research and debate since this is the greatest contribution we can make for our country. We refuse to bow down and accept a country where research and free thought are a crime. We will continue to struggle alongside those who defend their territory and their way of life.
Cochabamba – Bolivia, 8th December 2017
À L’OPINION PUBLIQUE
Chers amis du CEDIB:
Il est de notoriété publique que le CEDIB, Centre de documentation et d’information Bolivie s’apprête à célébrer ses 50 ans. Il est né en pleine dictature militaire avec pour objectif de documenter et sauvegarder la mémoire historique reflétée dans la presse nationale, en créant pour cela des archives uniques en leur genre.
Personne n’ignore qu’au cours des dernières années, la politique agressive du gouvernement concernant l’exploitation des ressources naturelles est de plus en plus incompatible avec les garan-ties et les mécanismes prévus dans l’ordre démocratique pour un environnement respectueux des droits de l’homme en général et de ceux liés à l’environnement en particulier.
Dans ce contexte, les organisations de la société civile comme la nôtre, qui remettons en cause l’expansion des concessions pétrolières et minières dans les zones protégées et les territoires indi-gènes, sont la cible d’attaques systématiques, désignées à la vindicte publique, harcelées sur le plan fiscal, économique et administratif, menacées de multiples façons.
Pour ce qui est de notre organisation, elle a dû lutter au cours de ces dernières années pour pour-suivre son travail, en dépit d’actions incessantes visant à entravernotre existence économique et juridique. Nous détaillons ci-dessous les plus importantes, tout en soulignant au préalable notre préoccupation face à leur agressivité croissante.
• Harcèlement administratif de la part de différentes instances
• Dénigrement et menaces publiques de la part de hautes autorités du pouvoir exécutif.
• Insécurité juridique, du fait que le processus de renouvellement de notre statut juridique est en instance depuis trois ans.
Nous informons l’opinion publique que malgré le harcèlement administratif abusif, et l’énorme effort qu’impliquait la vérification de documents et dossiers de plus de vingt ans, nous avons dans tous les cas été en mesure de prouver que nous avons rempli toutes nos obligations.
Nous pensons que voyant que cette voie ne menait à rien, ils ont cherché de nouveaux motifs pour nous attaquer. Au début de cette année, M. Juan Ríos, allié notoire du gouvernement, a profité de sa position de recteur de l’UMSS pour nous expulser contre notre gré du siège qui abritait le patrimoine de notre fonds documentaire.
Bien que le coup ait été dur, la volonté de l’équipe, ainsi que la solidarité nationale et internationale nous ont permis de continuer à fonctionner et de reprendre nos activités dans la normalité. Alors que l’année se termine, nous sommes informés d’une mesure d’annotation préventive de nos biens et de gel de nos comptes bancaires.
Ces mesures affectent principalement les droits du travail des travailleurs et travailleuses du CEDIB.
La plupart des fonds immobilisés (environ 83%) correspondent aux salaires et aux avantages sociaux de l’équipe de travail, pour la plupart des femmes chefs de famille. Cette mesure est abusive car il n’était pas nécessaire d’aller aussi loin puisque le montant exigé dépasse la valeur des biens immobilisés (puisque la valeur des biens immobilisés dépasse le montant exigé) et devenir la cible d’amendes si nous cessons de remplir nos obligations nous met dans une situation de vulnérabilité. Pour conclure, nous sommes sûrs que ces attaques s’inscrivent dans un contexte de harcèlement croissant des défenseurs des Droits de l’homme et de la nature en Bolivie, qui vont depuis des ac-tions violentes dans les territoires indigènes, la division et à la prise de contrôle d’organisations in-digènes jusqu à l’adoption d’une loi qui restreint la liberté d’association civile pour les organisations qui ne sont pas alignées sur les politiques gouvernementales.
À tous les amis, amis et défenseurs des droits de l’homme et de l’environnement, nous vous deman-dons votre soutien en cette période difficile. Nous exigeons l’arrêt du harcèlement contre le CEDIB, des garanties d’un procès équitable qui respecte notre droit à la défense, ainsi que le déblocage immédiat de nos comptes pour éviter d’affecter les droits du travail et les moyens de subsistance des travailleurs et travailleuses du CEDIB.
Nous proclamons notre volonté de continuer à travailler et à nous battre pour notre droit à l’existence, à la recherche et au débat, qui constitue ce que nous pouvons apporter de meilleur à notre pays. Nous ne sommes purement et simplement pas disposés à accepter de vivre dans un pays où la recherche, la libre pensée et la défense des droits humains seraient un délit. Nous continuerons à avancer avec tous ceux qui défendent leurs territoires et leurs modes de vie.
Cochabamba – Bolivia, 8 décembre 2017