Este fin de semana se realizó en Paysandú el 3er Encuentro de Mujeres, Lesbianas y Trans del Uruguay (EMLTU). Cientos de personas nos reunimos en el hermoso camping Guyunusa, al lado del río Uruguay, para encontrarnos, compartir, debatir, aprender y construir juntas/es.
Como siempre que nos encontramos, logramos generar un espacio seguro y libre donde sentirnos acompañadas/es y reconocernos las unas a las otras. Sin miedos, sin violencias, relacionándonos desde el cuidado y reconociéndonos en la misma lucha.
El camping fue territorio feminista durante todo el fin de semana. “Que el patriarcado y el capitalismo caigan juntos”, “Eso que llaman amor es trabajo no remunerado” y “Somos el grito de las que ya no tienen voz” eran algunas de las consignas que se levantaban en el alambrado que daba a la calle. También llenaban el espacio los rostros de las pibas desaparecidas; banderas de los pueblos originarios; pañuelos verdes, violetas y amarillos; bordados en apoyo a las niñas de Guatemala; carteles que recordaban distintas luchas latinoamericanas y fotos para acompañar la lucha kurda.
La jornada del sábado comenzó con una apertura bajo lluvia, acompañada de cantos, gritos y baile. Luego se realizaron las rondas de intercambio, donde nos separamos por grupos para compartir experiencias y debatir sobre los temas que nos atraviesan. Los talleres de la tarde se llevaron a cabo en un galpón cercano al camping, donde luego se realizó el cierre artístico y el baile.
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El domingo inició con más talleres, seguidos por nuevas rondas de intercambio. Desde Cotidiano Mujer llevamos el taller “Notas para la memoria feminista”, donde hablamos sobre el movimiento feminista en Uruguay tras la dictadura y debatimos sobre estrategias para mantener activa la Historia feminista. Compartimos una de nuestras publicaciones, del mismo nombre del taller, que está disponible para descargar aquí.
En la tarde se llevó a cabo la Asamblea, donde se eligió Canelones como próxima sede del Encuentro. Luego marchamos para inundar de feminismo toda la ciudad de Paysandú y realizamos la intervención chilena “Un violador en tu camino”.
Una vez más hicimos historia. La lluvia no logró parar nuestra fuerza ni energía. Estamos juntas y estamos cambiando el mundo.
