Fernán Gómez
Vivimos tiempos de cambios, cambios sociales y culturales que se mezclan con nuevos proyectos y agendas políticas que crean un escenario político distinto. La llegada al poder de líderes con discursos ultra conservadores y reaccionarios es una expresión de estos cambios. En estos tiempos es importante recordar que este escenario no sale de la nada, sino con la ayuda de fuertes actores como son los movimientos antiderechos. Pero, ¿qué entendemos por movimientos antiderechos?
Es complicado definir exactamente qué son los movimientos antiderechos, ya que el concepto es usado para englobar diferentes movimientos con diferentes objetivos políticos, grupos que no de por sí tienen que estar integrados u organizados por definición. Lo que tienen en común es un discurso derechista que busca la eliminación de políticas y leyes establecidas en los gobiernos progresistas anteriores. Tal rechazo lleva a una oposición a políticas dirigidas a problemáticas de género, como las relacionadas con el aborto y la diversidad sexual. Puede que como fenómeno no sea tan reciente, pero su presencia se ha vuelto más fuerte en los últimos años.
El discurso de estos movimientos está marcado por un rechazo a lo que ellos llaman “ideología de género”. El concepto se refiere a la existencia de una “imposición” en la cultura, la educación y las leyes de perspectivas LGBT y feministas sobre la sexualidad, la familia y las relaciones. Se denomina “ideología” porque según sus impulsores no tiene ninguna fundamentación sino que es pura ideología que contradice enunciados científicos.
Presencia de movimientos antiderechos en América Latina
Estos movimientos han cobrado importancia últimamente a lo largo de todo el continente americano, muchas veces vinculados a iglesias u organizaciones cristianas. En Argentina, por ejemplo, la proposición de la ley de despenalización del aborto ha llevado a la movilización de muchos grupos provida, con el apoyo de iglesias católicas y evangélicas; como una en marzo de 2017, que se realizó bajo la convocatoria del “Día Internacional del Niño por Nacer”.
También han habido muchos casos en los que gobiernos han respondido a las demandas de estos movimientos. Este es el caso de Paraguay, donde en 2017 el exministro de Educación y Ciencia Enrique Riera aprobó la Resolución Riera, según la cual se considera “promoción de la ideología de género” en las escuelas el uso de contenido relacionado a educación sexual y reproductiva. Un caso excepcional de todo esto es Brasil, donde el actual presidente Jair Bolsonaro, en un discurso al asumir su mandato prometió “combatir la ideología de género conservando nuestros valores”. Más allá del discurso, una de las primeras medidas de Bolsonaro al asumir la presidencia fue la eliminación de los colectivos LGBT como sujetos de medidas y políticas relacionadas con los derechos humanos, por lo que puede verse claramente qué camino tomará su gobierno. Esto quiere decir que vivimos en un clima político donde no sólo estos movimientos tienen mayor fortaleza y presencia política, sino que además muchos políticos que comparten sus ideas están llegando al poder y están actuando para que se cumplan las expectativas de dichos movimientos.
¿Por qué han cobrado tanta relevancia estos movimientos en los últimos años? Para responder esta pregunta necesitamos hacer una breve trayectoria sobre su historia y origen.
Influencia evangélica en el continente americano
El evangelismo ha tenido una fuerte presencia en la política latinoamericana. Julio Córdova Villazón en “Viejas y nuevas derechas religiosas en América Latina: los evangélicos como factor político”realiza un análisis sobre el evangelismo como fuerza política en el continente. El autor considera cuatro etapas de lo que es la presencia evangélica en la política latinoamericana. La primera etapa toma lugar a principios del siglo XX, y se refiere a la lucha por la “libertad de conciencia”. Esto implica una separación del Estado de la Iglesia Católica. En una alianza con partidos liberales, los evangélicos fueron una fuerza clave para lograr que la influencia política de la Iglesia Católica fuera más reducida y en algunos países incluso se logró la separación entre estado e Iglesia. Se podría decir que en estos tiempos la acción política de organizaciones evangelistas tenía un tinte progresista.
La industrialización latinoamericana de después de la crisis de 1930 hizo que crecieran las clases medias y que gran parte de población emigrara hacia las ciudades. Las condiciones de vida de estos sectores cambiaron profundamente, lo que hizo que buscaran nuevos marcos interpretativos de su vida y sus condiciones. Esto hizo que se acercaran más a las iglesias evangélicas. Al mismo tiempo, en estas iglesias cambia el carácter, y sus líderes pasan a promover más la disciplina, el orden, el trabajo y la obediencia. Se construye así un discurso vinculado a la estabilidad y seguridad del status quo.
Una segunda etapa se da durante la década de 1960 y 1970, donde la postura de los evangelistas comienza a tener matices; una pequeña parte de los evangelistas se alía a la lucha por los derechos humanos y el socialismo, pero la mayoría apoya o acepta los proyectos dictatoriales militares latinoamericanos.
Con el retorno a la democracia se da el inicio a una nueva etapa, en donde la inestabilidad social y económica lleva a muchas personas a encontrar soporte en las iglesias evangélicas, creciendo su influencia en la población. Estas instituciones comienzan a tomar un rol de reestructuración de las familias latinoamericanas y personalidades evangélicas comienzan a formar partidos políticos, los cuales no tuvieron mucho apoyo popular, pero últimamente crearon una conciencia política en los/as evangélicos/as.
Una cuarta etapa se da a principios de este siglo, donde propuestas para ampliar y modificar los derechos sexuales y reproductivos son vistas con rechazo por parte de la comunidad evangélica, naciendo en este contexto los llamados movimientos provida y profamilia.
Por lo tanto, por medio de un cambio de las condiciones socioeconómicas y culturales de las instituciones evangélicas tras la trayectoria y los eventos que se van dando a lo largo del siglo pasado, el rol de estas instituciones en la sociedad va cambiando, así como los sectores sociales a los que responde. Esto hace que pase de enfrentarse a las normas de un status quo, a defender su estabilidad.
El aborto: un ejemplo polémico
Desde 1973 el aborto en Estados Unidos es practicado de forma legal. Sin embargo, algo ocurrió recientemente: en Alabama, el 14 de mayo de 2019 se aprobó una ley que restringe la interrupción del embarazo en casi todos los casos, incluidos casos de violación. Alabama no ha sido el único estado: otros 16 este año han implementado normas que prohíben el aborto. La intención de quienes promueven esta ley es que llegue la propuesta hasta la Corte Suprema, donde se podría aprobar debido a la mayoría conservadora.
Esto, aunque alejado de la realidad nacional, recuerda a un evento sucedido en Uruguay hace unos años. En 2013 se creó la Comisión Nacional Pro Derogación de la Ley de Aborto, la cual llevaba a cabo un referéndum para eliminar la ley y penalizar los abortos en el país. La Comisión había llegado a juntar 67 mil firmas, muchas más de las 52 mil exigidas para que se lleve a cabo el referéndum; sin embargo, la ley no fue derogada y se encuentra vigente, ya que durante el referéndum no se consiguieron los votos necesarios. Estos dos eventos nos hacen pensar sobre las luchas y conflictos alrededor de esta ley en todo el continente.
Según el Centro por los Derechos Reproductivos (CRR), en los últimos 25 años han habido grandes cambios con respecto a la despenalización del aborto a nivel global. Durante estos años, 47 países lograron que se establecieran marcos legales para el aborto, 15 de ellos gracias a movilizaciones feministas (Uruguay es uno de estos casos) .
En Latinoamérica, este tema resulta diverso y matizado: existen distintas legislaciones dependiendo del país. Actualmente sólo cinco países permiten un acceso completamente seguro al aborto: Cuba, Puerto Rico, Guyana, Guyana Francesa y Uruguay.[1] Por lo tanto, todavía se puede observar la fortaleza del discurso y la incidencia política de los actores antiderechos con respecto a este tema.
Pese a la poca cantidad de países latinoamericanos que permiten con total libertad el acceso a un aborto legal y seguro, el activismo de colectivos feministas ayudó a que se discutiera y cuestionara más el tema, como es el caso de Argentina, donde una gran movilización hizo que se analizara el tema en el Congreso y se discutiera un proyecto de ley en 2018 (que finalmente no obtuvo los votos necesarios para su aprobación). Esta movilización pasó fronteras e inspiró a mucha gente para movilizarse en países de la región. Sin embargo, la acción de colectivos antiderechos también resulta fuerte, como se puede evidenciar con el caso de Estados Unidos. El caso de la despenalización del aborto es un claro ejemplo de la situación que vivimos con respecto a las luchas por los derechos sexuales y reproductivos: una tensión política que tiene diferentes resultados en cada país.
¿Qué nos espera?
Carlos Iafigliola, diputado y precandidato a la presidencia del Partido Blanco en nuestro país, anunció por las redes sociales que se consiguieron reunir las firmas suficientes para pedir un pre referéndum que busca derogar la Ley Integral Trans. Esta iniciativa llegó a obtener 70.000 firmas, más de las necesarias (52 mil). Sobre la ley, el precandidato mencionó: “Es peligrosa porque introduce una ideología de género que explícitamente niega la biología, niega que nacemos varón y mujer y dice que se nos asigna convencionalmente un sexo al nacer, y a partir de ahí genera todo el relato de la ley” . En esta frase se puede ver una preocupación por las repercusiones que pueda generar la ley en la forma en que percibimos a las mujeres y los hombres. Este discurso recuerda a las posturas evangelistas frente a los derechos sexuales y reproductivos, así como a los argumentos de quienes se posicionan contra la llamada ideología de género. Todo esto nos muestra que en este mismo año en Uruguay se puede observar la influencia de estos movimientos, en este caso posicionándose en contra de una ley no implementada en otras partes del continente.
El referéndum para derogar la ley de despenalización del aborto en 2013 no llegó a las firmas suficientes. Sin embargo, esto no asegura la persistencia de la ley, ya que el mismo Iafigliola promete trabajar para erradicarla si llega a la presidencia. En estos tiempos de fortalecimiento de estos movimientos, hay que recordar que no alcanza con conquistar derechos. Los derechos obtenidos legalmente en un gobierno pueden caer en el siguiente. Por lo tanto, es importante recordar que la conquista de derechos no es el final del camino: luego es fundamental la acción política para asegurar su mantenimiento a lo largo del tiempo.
Bibliografía
-AWID (7 de diciembre de 2017). Webinario #DerechosEnRiesgo: Cómo se organizan las fuerzas anti-derechos en América Latina y nuestra resistencia colectiva. Página web de AWID. Artículo en:
-BBC News Mundo (22 de mayo de 2019). Aborto en Estados Unidos: la batalla de los conservadores para ilegalizar la interrupción del embarazo. Página web de BBC. Artículo en:
https://www.bbc.com/mundo/noticias-48373750
-BBC News Mundo (15 de mayo de 2019). Alabama aprueba la ley de aborto más restrictiva de EE.UU.: ¿cómo puede esto llevar a que se vuelva a penalizar la interrupción del embarazo en el país?. Página web de BBC. Artículo en:
https://www.bbc.com/mundo/noticias-internacional-48277142
-Córdova Villazón, J. (Noviembre – diciembre 2014). Viejas y nuevas derechas religiosas en América Latina: los evangélicos como factor político. Nueva Sociedad: Democracia y política en América Latina. Artículo en:
-Demirdjian, S. (12 de junio de 2019). 41% de las mujeres en edad reproductiva vive en países donde el aborto es ilegal o está restringido. La diaria Feminismos. Artículo en: https://feminismos.ladiaria.com.uy/articulo/2019/6/41-de-las-mujeres-en-edad-reproductiva-vive-en-paises-donde-el-aborto-es-ilegal-o-esta-restringido/
-Greif, M. (8 de mayo de 2019). Habrá un pre referéndum para derogar la ley Trans. La Diaria. Artículo en:
https://ladiaria.com.uy/articulo/2019/5/habra-un-pre-referendum-para-derogar-la-ley-trans/–
-La Red 21 (24 de marzo de 2019). Este lunes presentan firmas para derogar la ley Trans. Página web de La Red 21. Artículo en:
http://www.lr21.com.uy/politica/1395812-ley-trans-uruguay-firmas-referendum-derogar-partido-nacional
-Lorenzo, J. (23 de marzo de 2018). Los antiderechos volvieron a movilizarse este sábado. La izquierda diario. Artículo en:
https://www.laizquierdadiario.com/Los-antiderechos-volvieron-a-movilizarse-este-sabado
-Magic Markers (canal de youtube) (15 de diciembre de 2016). ¿Cuál es la joda con la ideología de género? (vídeo de youtube). Link del video:
https://www.youtube.com/watch?v=mxm8PqXPFf8
-Radio Uruguay – 1050 AM (2 de agosto de 2018). Iafigliola: “Voy a trabajar para que la ley del aborto caiga”. Página web de Radio Uruguay 1050. Artículo en:
http://radiouruguay.uy/iafigliola-voy-a-trabajar-para-que-la-ley-del-aborto-caiga/
-Rodríguez, C. (24 de marzo de 2019). Los antiderechos están en campaña. Página 12. Artículo en:
https://www.pagina12.com.ar/182861-los-antiderechos-estan-en-campana
-Uy.press – Agencia Uruguaya de Noticias (21 de marzo de 2013). Comisión Pro Referéndum para derogar interrupción del embarazo presenta firmas. Página web de Uy.press. Artículo en: https://www.uypress.net/auc.aspx?38645
[1] Esto es en las primeras semanas de gestación. También en Ciudad de México. En otras ciudades y regiones hay causales. Ver el mapa completo en: https://feminismos.ladiaria.com.uy/articulo/2019/6/41-de-las-mujeres-en-edad-reproductiva-vive-en-paises-donde-el-aborto-es-ilegal-o-esta-restringido/