Nobel: Una historia con sexo y apellido

Este artículo fue publicado en la revista Cotidiano Mujer Nº25, en 1997. Puede encontrar todas las revistas aquí y los posteriores cuadernos aquí.

Las relaciones entre las mujeres y las ciencias, especialmente las llamadas «duras» (matemáticas, física y química) han sido altamente conflictivas en todas las épocas y sociedades. En nuestra recorrida por esa historia -que siempre tuvo sexo- descubrimos que en Grecia, Argentina, Suecia, Francia o Uruguay, las mujeres científicas han sido y aún son, ignoradas, desalentadas, o menos sutilmente enviadas a «lavar los platos». En pocas palabras la historia de la relación entre mujer y ciencia también ha sido escrita bajo el signo nada astrológico de la discriminación. El Premio Nobel es en este sentido un territorio emblemático para sacar conclusiones.

«Todas las tareas de los hombres son también tareas de las mujeres, pero en todas ellas, la mujer es inferior al hombre» (Sócrates, siglo IV AC)

Emmy Noether (1882 – 1935) es la creadora del Algebra Moderna. Noether, alemana de nacimiento, no pudo ingresar a la universidad formalmente y fue admitida sólo como oyente. Su teorema es esencial dentro de los trabajos de la relatividad. Pero nunca le dieron el premio.

Joselyn Bell, en 1967 descubrió unos cuerpos celestes de pequeñas dimensiones y enorme densidad que emiten radiación en forma intermitente, llamadas pulsars. Sin embargo, el Nobel lo obtuvo su jefe, Hewish, el astrónomo para el que Joselyn trabajaba.

Sabina Spielrein, rusa, muy vinculada con Freud y Jung, publicó en 1912, a los 27 años una artículo en el que por primera vez aparece la idea del impulso destructivo o de muerte relacionado con el impulso sexual. Jung y Freud utilizaron esta contribución sin jamás reconocerla públicamente.

El mecanismo de la determinación del sexo por los cromosomas fue realizado por Nettie Maria Stevens junto con Emund Wilson. Pero sólo él es hoy reconocido por el descubrimiento.

Cuando el premio llega, a veces llega tarde. Le pasó a Barbara McClintock que produjo la revolución más importante en biología al crear la genética molecular moderna. Lo hizo en los años 50, pero el Nobel llegó algo tarde: en 1983.

Las que sí lo recibieron, además del doblete de Marie Curie en Química y Física, entre otras son: Gerty Cori(1896-1957) Premio Nobel de Fisiología y Medicina, junto con su marido Carl por el descubrimiento del proceso del metabolismo de los glicógenos.

Rosalyn Yalow en 1977, Barbara McClintock en 1983, Rita Levi Montalcini en 1986, Gertrude Belle Elionen 1988. Todas en medicina. En Física, lo recibió María Goepper-Mayer en 1963, compartido con Eugene Wigner y Hans Jensen, los tres como descubridores de la estructura del átomo.

LA MUJER DE EINSTEIN

Otro misterio es la razón por la que Einstein, en 1921, luego de recibir el Premio Nobel de Física, le entrega el monto total a su ex esposa, Mileva, en cumplimiento de una vieja promesa. Se habían casado cuando ambos estudiaban en el Politécnico de Zurich. Hay una polémica que sostiene que Mileva Maric colaboró directamente en las investigaciones sobre la teoría de la relatividad. ¿En qué se basan? En 1990, la American Association for the Advancement of Science organizó un foro para dilucidar la polémica. Analizaron la correspondencia entre Einstein y Mileva y según el físico matemático Hans Walker, las ideas fundamentales sobre la teoría de la relatividad proceden de Mileva durante sus primeros años de matrimonio. En una de sus cartas de marzo de 1921, Einstein sostiene «qué feliz y orgulloso estaré cuando juntos hayamos culminado con éxito nuestro trabajo sobre el movimiento relativo».

Una anécdota final: Mileva gastó todo el dinero del premio en un hijo enfermo, pero Einstein ya había cumplido su promesa: la dejó en la indigencia hasta el final de su vida e incluso no le permitía que le hablara.

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